La ciudad de Ensenada estuvo en alerta por una llamarada gigante que salió de las antorchas de la refinería de YPF.
Según publicó el medio local Diario Hoy, el hecho puso otra vez en alarma a la región durante largas horas y desató el pánico en la zona.
Desde la empresa argumentaron que esas llamas se debieron a que "se están realizando tareas de mantenimiento programado en un compresor de gases de una unidad de conversión, lo cual implica una utilización más intensiva en la Antorcha".
El ex Secretario de Combustibles de la Nación, Gustavo Callejas, salió al cruce de la versión oficial y dijo: "La antorcha quema y contamina, esa es la realidad. Es un problema de contaminación que afecta visiblemente a los vecinos".
Las constantes emanaciones tóxicas que se expelen de las antorchas y chimeneas de YPF, ya habían sido noticia en ese medio, donde se remarcó "la creciente contaminación sonora y visual a la que se somete a la región por parte de una empresa que no tiene control".
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